El FC Barcelona tiene un verano agitado por delante para remodelar la plantilla de cara a la próxima temporada. Se están centrando ahora todas las miradas en el extremo, con Nico Williams en liza y la opción también de Luis Díaz, pero no hay que perder de vista que otra de las prioridades para el club y Hansi Flick es la posición de centrocampista.
Entre los que más gustan se encuentra Amadou Onana, que el lunes fue eliminado con Bélgica por Francia, pero que dejó un master en Düsseldorf de cómo detener a Kylian Mbappé. Sin lugar a dudas fue uno de los jugadores más destacados y Domenico Tedesco, seleccionador de los diablos rojos, tenía claro que el papel del futbolista del Everton iba a ser capital para poder frenar el talento del francés, y por eso cambió de sistema para acercarlo lo más posible a su zona.
El Barça busca fútbol, pero también músculo y potencia para adaptarse a un fútbol moderno que cada vez la demanda más. Demostró Onana ambas cosas, además de una inteligencia táctica defensiva de élite. Hizo un clínic de ayudas defensivas a Castagne cada vez que Mbappé cogió el balón o Theo subió la banda. Hasta tal punto, que su imponente presencia evitó que el del Real Madrid se la jugara tirando sus clásicas diagonales, porque cada vez que quiso dejar atrás a su par, estaba el centrocampista belga a su paso. Y sí, hasta le quitó balones en el duelo individual, haciendo muy incómoda la vida a Kylian, que no destacó como de costumbre.
Onana, que con el balón se dedicó a jugar fácil el pase seguro, con un 92% de acierto, estuvo excelente en los duelos. Únicamente perdió uno, mientras que no fue regateado ninguna vez en todo el partido a pesar de medirse a Mbappé, un maestro en este arte. Seguro que desde el Barça estuvieron atentos al partido de Amadou y, quien sabe, si la próxima temporada se repetirá el duelo contra el francés pero vestidos ambos de corto en un Clásico.
Ahora mismo el club está entre Onana o Mikel Merino, que también está en la Eurocopa con España, aunque de momento con un rol más secundario. Gusta más el belga, pero parece difícil poder lograr traerlo al Camp Nou, porque tiene detrás a Manchester United y Bayern de Múnich y eso podría disparar su coste, mientras que el Barça tiene que estar atento al ‘fair play’.