FAMILIARES DE LAS MONJAS DE BELORADO SALEN EN SU DEFENSA TRAS SER EXCOMULGADAS: “LLEVAN MUCHO TIEMPO ACOSADAS Y PERSEGUIDAS”
Uno de los temas de los que más se ha hablado estos últimos meses ha sido el cisma que se ha generado sobre la iglesia católica por el atrincheramiento de unas monjas de Belorado (Burgos) y Orduña (Bizkaia). El pasado sábado el arzobispo Iceta llevó a cabo la orden de excomulgación, por lo que ya no forman parte de la congregación.
Y han sido las propias implicadas las que han decidido dar un giro inesperado: han expulsado del monasterio al falso obispo Pablo de Rojas y al cura coctelero José Ceacero. Por lo que han decidido salir de la Pía Unión de la San Pablo Apostol, tal y como expusieron ellas mimas en un manifiesto.
Ante esto, familiares de una de las monjas han querido hablar para el programa Vamos a ver y trasladar cómo se encuentran en estos momentos las protagonistas de los hechos. “Veo a mi hermana muy bien, no puedo decir nada malo porque la veo superbien”, ha expuesto la hermana de una de ellas.
Asimismo, ha querido dejar claro que ninguna de ellas son okupas, “porque una persona que tiene un piso es su piso, pues esto lo mismo”. “Ellas son independientes, tienen su trabajo aquí y es de lo que viven ellas”, ha añadido la madre, también presente.
La hermana de una de las monjas: “A la vista está que el arzobispado no las ha tratado bien”
Entre otras cosas, han dejado claro que hay muchas cosas que no han salido a la luz, pero que terminarán haciéndolo y “la justicia hará todo de su mano”. “Se han portado muy mal. A la vista está que el arzobispado no las ha tratado bien. Se han portado muy mal”, ha añadido la hermana.
“Llevan mucho tiempo acosadas y perseguidas por Mario Iceta, el arzobispo”, ha sentenciado la madre de la monja atrincherada. Y es que lo único que piden es que puedan seguir con su vida normal como hasta ahora. Sin embargo, la iglesia reclama la propiedad.
Y antes de terminar, han querido hacer un retrato de su familiar. Entre otras cosas, han desvelado que lleva desde los 18 años formando parte de este convento, concretamente desde 2001. “La vida de ellas sigue igual dentro del convento. Se dedican a su trabajo, a rezar, a sus cosas”, ha afirmado la hermana.
Además, ha querido negar rotundamente que haya, al menos, once trabajadores dentro del monasterio. Algo que califica como “mentira”. Ahora solo queda esperar a los próximos movimientos de una de las dos partes para ver cómo terminará el asunto.
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José Luis Martín Rojas 2024-06-27T11:59:40Z dg43tfdfdgfd