Lo había advertido durante las sesiones oficiales con los medios de comunicación antes del comienzo de Wimbledon, pero había abierto la puerta porque "algunas esperanzas de que juegue las hay".
Sin embargo, horas antes de tener que debutar, ya con el torneo comenzado, anunció su baja.
Un duro palo para Wimbledon, mucho más para su protagonista, la bielorrusa Aryna Sabalenka, vigente campeona del Open de Australia y aspirante a cualquier título de Grand.
Una de las grandes animadoras del tenis femenino, fuera del cuadro sin tan siquiera jugar.
Confesó que "está siendo frustrante, en el último mes sufro dolores de diferente índole. Intento ser positiva, pero está siempre en mi cabeza y me cuesta lidiar con ello".
Explicó su mayor problema, una lesión de hombro. "Una lesión realmente muy específica. Es muy rara, posiblemente sea el segundo o tercer tenista que ha sufrido una lesión en este músculo (el redondo mayor)".
Y que causa confusión, ya que "puedo hacer muchas cosas. Puedo entrenar, puedo golpear de fondo, pero sufro cuando saco. Te da la sensación de que no tienes ninguna lesión, pero el dolor aparece cuando saco. Hacemos una resonancia, cualquier cosa, mucha rehabilitación, muchos tratamientos. Todo. Pero si tengo que sacar, duele".
Su puesto lo ocupará la rusa Erika Andreeva, que se medirá a la estadounidense Emina Bektas.